Villahermosa, por lo menos hoy, está bajo control. Las presas siguen desfogando lentamente mientras se espera la próxima temporada de lluvias. Se ha afirmado que debido al calentamiento global las lluvias en el sur de México serán abundantes por lo que no se descarta el riesgo de inundación. Las obras de infraestructura contra las inundaciones llevan un paso lento. Los bordos de la ciudad están reconstruyéndose y la obra de desviación del rio Samaria y Carrizal (Compuerta el Macayo) están en proceso. Este es un trabajo que se va a largar, falta mucho por hacer, en especial el dragado de los ríos que rodean Villahermosa y los que la pueden poner en peligro de inundación.
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